¿Cómo la Propiedad Intelectual e Industrial mejora tu negocio?
Muchas empresas, y más en el ecosistema emprendedor, no disponen de la estructura interna necesaria o el dinero para invertir en campañas de márqueting para hacer conocer su producto o servicio, lo que provoca que éstas no puedan competir en el mercado con empresas ya establecidas, dificultando la posibilidad de crecer y establecerse.
El hecho de depender únicamente de la venta de su producto al consumidor final, hace que se jueguen todo su negocio a una sola carta, sin tener, como hemos dicho antes, los posibles suficientes para hacer conocer su producto, servicio o transmitir esa confianza que empresas ya establecidas y con experiencia sí que disfrutan.
En este punto, nace la opción de licenciar ese producto o servicio. La posibilidad de licenciar a terceros un producto elaborado por una empresa emergente, abre una nueva línea de negocio en la cual les permite obtener ingresos sin la necesidad de invertir todo o gran parte de sus ahorros en hacer conocer su producto.
Con la licencia, podemos obtener la confianza hacia nuestro producto, ya que la empresa licenciataria, comercializa nuestro producto a su nombre por nosotros y permite que éste sea introducido en el mercado y tenga ese sello de calidad que, nuestra empresa, al ser de nueva creación, aún no disfruta.
En un principio, el hecho de licenciar puede resultar muy beneficioso para este tipo de empresas, pero tenemos que tener en cuenta todo lo que supone la licencia y celebrar un contrato de licencia con la otra parte con unas condiciones favorables para la empresa emprendedora.
Cuando hablamos de productos que se puedan licenciar y que vayan directamente relacionados con el mundo emprendedor, lo primero que nos viene a la mente es el Software. La regulación del software se encuentra en la Ley de Propiedad Intelectual, ley que regula también la licencia de este tipo de productos.
Como se ha dicho anteriormente, es muy importante establecer una serie de condiciones en el contrato de licencia para no caer en los límites generales establecidos en la Ley de Propiedad Intelectual.
Ejemplo:
Si en el contrato de licencia de uso de Software no establecemos una duración determinada de la licencia, ésta será por 5 años. De igual manera pasaría para el alcance territorial de la licencia, que, si no se establece en el contrato, el alcance territorial será al país en el que se ha otorgado ésta. En la misma línea, es muy importante establecer qué tipo de licencia se otorga, dando la posibilidad al licenciatario de modificar el software del emprendedor e imponer su marca o no.
A partir de esto, se debe trazar una estrategia en el clausulado del contrato de licencia de uso de software (incluyendo a los demás contratos tecnológicos), ya que, por ejemplo, al emprendedor no le va a interesar limitar el alcance de la licencia a un solo territorio (o sí) o lo que puede ser más importante, que el tercero modifique el software como si fuera suyo y se pierda la marca del autor de éste. Por otro lado, se debe de establecer si la licencia va a ser exclusiva o no.
Esta estrategia se debe basar en que, en un cierto periodo de tiempo, la empresa licenciante pueda recuperar el control total de su producto y, sobre todo, que el producto no necesite de un tercero para ser comprado. El emprendedor se debe de haber nutrido de las oportunidades que le ha dado el licenciatario para dar a conocer el producto y una vez que éste tenga reconocimiento, poder ser vendido de manera independiente por la empresa creadora.
A parte de los Softwares, la ley establece licencias para otro tipo de productos, tales como producciones audiovisuales o invenciones protegidas por una patente o modelo de utilidad. Por eso mismo, licenciar un producto o servicio se puede extender a gran parte de la actividad de las empresas emprendedoras.
Pero, ¿cómo podemos llegar a conseguir que un tercero quiera obtener una licencia de nuestro producto?
El papel de las Administraciones Públicas y de las Universidades es fundamental para la creación de nuevas empresas y fomentar el crecimiento de la sociedad. Su actuación es esencial para poner en contacto a los emprendedores con estas empresas. Las Administraciones Públicas y Universidades deben jugar un papel protagonista promoviendo este ecosistema dónde emprendedores y posibles licenciatarios puedan conocerse y llegar a acuerdos fructíferos para ambos.
Esta conexión promovida por estas entidades repercute directamente en la sociedad, provocando un aumento en la inversión en la ciudad y en la innovación, construyendo un tejido empresarial fuerte y de referencia. Esto puede provocar un círculo de oportunidades, dónde las empresas que tenían la necesidad de licenciar su producto hayan crecido y ahora ellas, sean quienes dan la oportunidad a nuevos emprendedores para crecer y establecerse en el territorio.
En resumen, una fuerte conexión de la Entidades Públicas con las empresas de la zona y que conozcan detalladamente las necesidades de las empresas emergentes, favorece a la sociedad creando nuevas empresas, empleo y oportunidades de crecimiento.
Para cualquier consulta relacionada con este tema o en materia de Propiedad Intelectual e Industrial, no dude en contactarnos en el 932 000 149 o bien en el correo jrodriguez@etl.es
Jon Rodriguez
Protección de datos y Nuevas Tecnologías
